Let´s have a break, not a mental breakdown: La importancia de alejarse del problema para encontrar una solución

Estos días hemos estado hablando mucho de la importancia de repensar nuestro negocio en estos momentos de parón. Renovarse o morir, que dirían algunxs. Sin embargo, la escena caótica en la que nos encontramos puede llevarnos a una sensación de parálisis permanente. Es el famoso bloqueo creativo. Suele darse cuando nos hemos enfocado mucho en un tema hasta exprimirnos al máximo. Y parece que no hay salida. La idea no llega. Esta sensación no es terreno exclusivo del mundo publicitario o creativo, sino que se da en todas las personas que buscan crear, ya sean empresarios o carpinteros. Para no caer en una fustigación innecesaria y poder seguir adelante, lo mejor es parar. Abandonar el tema, por un rato. Y ponerte a hacer algo que te guste, que te ayude a desconectar. Esta, no es sino, una de las fases necesarias en todo proceso de creación de ideas. Si no nos creéis, os animamos a acompañarnos en este paseo por la técnica de James Webb Young.

Una técnica para producir Ideas, James Webb Young

Para el arte de producir ideas Young establece dos puntos a cumplir, los principios y el método. Los principios son tan solo dos. El primer principio es el siguiente: las ideas no son otra cosa que nuevas combinaciones. Seguido de este nos encontramos con que «las combinaciones se producen con la capacidad de ver relaciones». Bien, y ahora al atún. Al método, ¿qué pasos tengo que seguir para encontrar esa idea que saque a flote mi negocio?

Los 5 pasos para llegar a LA IDEA

1. Recogida de materia prima

Buscar información. ¿Qué obvio, no? Sí, pero no tanto. Muchas veces caemos en esperar que nos caiga del cielo. Por ejemplo, pon que quieres buscar un nuevo nombre para tu negocio. ¿Cuántas de vosotras os quedarías sentadas esperando a que apareciera por arte de magia? Pues no, para Young hay que rascar y rascar primero, hasta llegar a donde queremos. En esta etapa hay que recolectar dos tipos de material: específico y genérico. El específico sería aquel relacionado con tu negocio, producto y público. El general está relacionado con la vida y lo cotidiano, pero es igual de importante- y esta recogida no se acaba nunca-. Es la unión de los dos de donde surgirá lo auténtico.

2. De la frustración a la acción

Con todo lo recolectado vamos a intentar encajar las piezas. Aquí Young insiste en la importancia de no darse por vencida rápidamente, de darle un par de vueltas y giros. De aquí saldrán las primeras aproximaciones y esbozos pero, si seguimos los pasos  como tiene que ser, llegaremos al punto de no retorno. Al «no se me ocurre nada», al bloqueo del que hablábamos arriba. Perfecto, fase dos completada.

3. Let it be

Es hora de apartarse del problema y centrarse en otra cosa totalmente ajena. Aquí es a donde quería yo llegar. Cuando sientas que estás saturada con «ese algo», ya sea una idea o ya sea buscar una solución a la situación incierta de tu negocio, déjalo reposar y date un respiro. Cada cual tiene sus métodos, desde dar un paseo hasta bailar bajo la lluvia. Aquí voy a hacer un inciso en la teoría del autor y a contarte cómo se evade el equipo de HeadTeam. Eva, nuestra cabecilla, para alejarse del problema enciende los fogones. Cocinar escuchando la Ser mientras mezcla nuevos ingredientes hace que se cocinen en su subconsciente las buenas ideas.  Para Nerea, nuestra marketera por excelencia, lo mejor es darse un paseo por el campo- un poco difícil a 23 de marzo de 2020-, para que el aire limpio airee también sus nervios y la ayude a encontrar la tranquilidad y «la respuesta». Ángel, nuestro incansable cuentas, encuentra la distracción en el deporte y las series en versión original, cuando no en una buena partida de videojuegos. Fer, diseñador gráfico de HeadTeam y muchas otras cosas, se aleja del problema acercándose a un parque a correr- tampoco realizable ahora mismo-, viendo una «peli indie» o leyendo comics en su terraza. Por mi parte, si es estrés es bajo, me basta con garabatear un rato. Si es medio, entonces bailo sin mucha coordinación pero con mucho empeño en mi habitación, esperando que ningún vecino o vecina me vea. Si es alto, solo queda tirarse en la cama con «Before the beginning» de Frusciante on repeat. Ya veis, cada uno tiene su método de desconexión, pero es importante pasar por él para llegar a esa conexión final. James Webb Young

4. Cuando hace clic

Según Young, si hemos cumplido todo lo anterior llegará un momento en el que empiece a sonar «Hallelujah» de Leonard Cohen y se nos presente la idea, la solución, la respuesta. Así, aparentemente, sin más. Después de esforzarte y abandonarla, llegará la idea. Este Eureka! puede producirnos algo de escepticismo. Pero a quién no le ha pasado que no acordaba del nombre de esa actriz de esa peli tan famosa y al pasar un rato y cansarse de pensar y pensar en él y ponerse a otra cosa, boom, ahí está.  

5. Revisión o efecto Zara

Te pruebas de nuevo ese vestido que te quedaba tan fabuloso en la tienda en tu casa. Y no es lo mismo. ¿Pero no me quedaba de muerte? La idea o solución no suele ser tan magnífica cuando le vuelves a echar un ojo. No pasa nada, seguramente sea un punto del que partir. Lo importante ahora es someterla a vigilancia, compartirla con otras personas para que cobre nuevas formas y se convierta en algo útil y valioso. ¡Toca ponerlo en práctica!

Descansar para triunfar

Como habéis visto y lo que nos recuerda James Webb Young, dedicarle tiempo a vuestros hobbies de siempre o a nuevos temas que, en principio, no pueden aportar nada a vuestro trabajo, es crucial. Nos servirá tanto para la recolección de material general como para el momento de desconexión. Así que, cada vez que pienses que no te mereces esa tarde aprendiendo sobre cerámica griega, piensa que no es procrastinación, es pre-creación. ¡Sigue procrastinando en nuestra web!   Sara Blanco,